En un audaz movimiento que podría cambiar el rumbo del conflicto en Ucrania, Estados Unidos ha anunciado su compromiso de enviar cazas F-16 a este país, además de brindar entrenamiento a los pilotos ucranianos.
Durante la reciente cumbre del G7 en Hiroshima (Japón), Jake Sullivan, asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, reveló los planes de apoyar a Ucrania con aviones de cuarta generación, incluyendo los icónicos F-16.
El anuncio y el compromiso de Estados Unidos
El presidente Joe Biden ha comunicado a sus homólogos del G7 que Estados Unidos respaldará un esfuerzo conjunto para capacitar a los pilotos ucranianos en el manejo de estos avanzados cazas. Sin embargo, aún no se ha confirmado si los aviones serán enviados directamente por Estados Unidos, ya que la Casa Blanca está trabajando con sus aliados para determinar la cantidad de aviones que se enviarán y quién se encargará de su entrega.
Este anuncio marca un drástico cambio de rumbo en la política estadounidense, ya que el presidente Biden, en una conversación con David Muir de ABC en febrero, descartó inicialmente el envío de estos cazas a Ucrania. El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, ha revelado que países como Dinamarca y Holanda ya están tomando medidas para dirigir el entrenamiento de vuelo de los F-16 destinado a los pilotos ucranianos. Además, Noruega, Bélgica, Portugal y Polonia también se han ofrecido a contribuir a esta importante iniciativa de entrenamiento.
La inversión y el compromiso de Estados Unidos y sus aliados
El General Mark Milley, Jefe del Estado Mayor Conjunto, ha señalado que el costo de 10 aviones F-16 ascendería a 1.000 millones de dólares, a los que se sumarían otros 1.000 millones para su mantenimiento. Estas cifras destacan la seriedad y el compromiso de Estados Unidos y sus aliados en apoyar a Ucrania en su defensa y protección.
Es importante destacar que, si bien Estados Unidos podría decidir enviar los aviones por cuenta propia, recientes declaraciones indican que no se opondría a que los aliados europeos sean los encargados de su entrega. Esta postura ha generado una fuerte respuesta de Rusia, quien ha amenazado con una dura reacción en caso de que los aviones sean efectivamente entregados a Ucrania. Alexander Grushko, viceministro ruso de Asuntos Exteriores, ha advertido que Rusia tiene los medios necesarios para alcanzar sus objetivos y que tomarán en cuenta este hecho en sus planes.