The professional gamer playing video games online in the neon room
El próximo 29 de agosto se celebra el Día Mundial del Videojuego, un mercado que no deja de crecer en seguidores y aficionados. La verdad es que, aunque comenzaron siendo actividades solitarias, ahora la mayoría cuenta con una comunidad online que habla, chatea o envía mensajes instantáneos durante las partidas.
Check Point® Software Technologies Ltd. (NASDAQ: CHKP), un proveedor líder especializado en ciberseguridad a nivel mundial, advierte que ahora que los videojuegos son una de las mayores industrias del entretenimiento del mundo, es también uno de los principales objetivos de los ciberdelincuentes. En comparación con los libros, las películas, la televisión y la música, es también el medio más inherentemente digital. Los jugadores suelen confiar tanta información personal a las empresas de la industria como lo harían a su lugar de trabajo, a las compras online o incluso a las instituciones financieras. Entonces, ¿qué ganan los ciberdelincuentes al dirigir sus ataques hacia videojuegos?
Los ciberdelincuentes vulneran las cuentas de los gamers y roban sus bienes virtuales, para luego venderlos a otros usuarios por dinero del mundo real. Las economías de los videojuegos han sido básicamente las precursoras de las criptomonedas, y en ellos hay que tener siempre presente que el dinero virtual que se gana en él no puede usarse en el mundo real, por lo que sigue siendo una mercancía con valor tangible para sus usuarios. Muchos juegos se publican, venden y autentifican online en plataformas de distribución como Steam, Origin, GOG Galaxy y otras. Los jugadores suelen gestionar todos o la mayoría a través de una sola cuenta, y los usuarios de Steam a largo plazo pueden tener bibliotecas de cientos de juegos. Se han dado casos de atacantes que han robado estos objetos de sus inventarios, así como cuentas enteras en Origin. Además, los juegos online y para móviles recopilan una gran cantidad de datos sobre sus usuarios, cuanto más personales, más valiosos son para los ciberdelincuentes.
En el caso de los videojuegos para móviles pueden incluso rastrear información tan íntima como la ubicación o incluso escuchar las llamadas telefónicas. En muchos casos, sus transacciones y suscripciones mensuales online hacen que la información financiera se incluya con los datos del usuario. Para proteger a todos los jugadores, Check Point Software quiere advertir del peligro y destaca las amenazas a las que se enfrentan para que sean capaces de identificarlas y estén más protegidos
“Los videojuegos son una ventana abierta a la entrada de muchos tipos de ciberataques y extremar las precauciones ya no es una opción sino una necesidad. Contar con un doble factor de autentificación para acceder a la cuenta, instalar un software de protección o conocer las señales de un ataque de phishing son clave para evitar convertirse en víctima de un ciberataque. Estos entretenimientos son cada vez más populares y al utilizarlos de forma cotidiana es muy sencillo bajar la guardia y confiarse. El principal problema es que los ciberdelincuentes siempre están alertas y no dejarán pasar ni una oportunidad”, alerta Gery Coronel, Country Manager para Chile de Check Point Software.